hola a todos. soy nuevo en el foro. yo no tengo pruebas fehacientes de que el tabaco afecte, los médicos no me dicen nada al respecto. claro que los médicos no saben todavía que es lo que tengo, aunque yo lo sospecho desde hace años, y su nombre es síndrome de intestino irritable. siempre he tenido molestias de estómago, desde niño. luego de adulto siempre con complicaciones. recuerdo que todo empezó a ponerse feo después de una depresión, aunque yo no supe que tenía depresión hasta años después. sufría mucho y eso atacaba mi estómago. luego me diagnosticaron elicobacterpilori. tuve tratamiento, pero la cosa siguió igual. luego por lo visto tuve ulceras. en esa época yo bebía mucho alcohol y tabaco. también notaba desde hacía años que alimentos me caían mal. pero cambiar la dieta en casa era difícil, la familia decía que yo simplemente estaba preocupado por mi peso, que quería adelgazar y cosas así. los fritos y grasas me fastidiaban bastante, bueno, en realidad muchísimo. siempre tenía que ir al baño repetidas veces todos los días, lo sigo haciendo todavía. el estómago se me hinchaba mucho después de cada comida y las digestiones eran muy lentas. siempre sentía reflujo y muchísimo ardor que me subía por el esófago. pasé otra depresión y esta vez dejé las bebidas alcohólicas por completo, las bebidas con gas, la carne, los fritos, las grasas. durante años he ido viendo que es lo que me afecta y lo que no en lo que a alimentos se refiere. ya no dejo que nadie me diga lo que tengo que comer y lo que no, simplemente digo "NO" y que piensen lo que quieran. nadie más que nosotros conocemos aquello que nos sienta bien y lo que no, en todos los sentidos. pero debemos aprender en tener confianza en nosotros mismos y prestar un poco de atención a nuestro propio cuerpo; a lo que nos cae bien y a lo que no. luego empecé a hacer algo de deporte, empecé a andar mucho. luego a correr. pero seguía fumando y créanme cuando les digo que el tabaco es lo que peor me sienta y sin embargo es lo más difícil de dejar a un lado. a veces intentaba dejar de fumar, y estaba así algunos días, durante los cuales me ponía peor de todo en general, era el síndrome de abstinencia, yo no tengo duda en que el tabaco es una droga permitida, un gran negocio. al cabo del tercer o cuarto día empezaba a ir al baño con menos frecuencia y las heces eran más duras, casi normales, el estómago me bajaba, tenía menos gases (no he hablado antes de mis asombrosos gases?, bueno, mejor no hacerlo
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por fin dejé de fumar definitivamente y al cabo de unas semanas me sentía un hombre nuevo, liberado. mi barriga era otra, mi estómago estaba como en paz. había cambiado los hábitos alimenticios, había dejado el alcohol, el tabaco, hacía ejercicio... y en todos estos años también he aprendido mucho de la vida, a través del aprendizaje, de los desengaños, del sufrimiento... las personas debemos aprender de todo lo malo, porque seguro que sacamos algo bueno de todo ello, sobre todo si estamos atentos. después de todo el mal solo es un pretexto para que el bien perdure.