En relación con el llamado síndrome del restaurante chino no está demostrado que se deba a la intolerancia al glutamato monosódico. Más bien parece ser causado por otros aditivos o conservantes empleados los platos que se sirven en restaurantes de baja calidad. Lo digo porque yo era el típico que de jovencito salía de un restaurante chino y tenía que correr al lavabo. Cuando tuve conocimiento de que se creía que estos problemas gastrointestinales se debían al glutamato, lógicamente dejé de acudir a estos locales. Había comprobado que si iba a un restaurante japonés o a un restaurante thailandés no tenía ningún problema. Lo atribuía al hecho que estas cocinas no utilizaban glutamato sin relacionarlo con el hecho que, al aparecer los restaurantes thai y japoneses en nuestras ciudades más tarde que los chinos, mi nivel económico también había crecido (ya no era un estudiante que va de baratillo) y, por lo tanto, acudía a restaurantes de mejor calidad.
Hace un par de años fui de viaje a Shanghai e iba un poco preocupado por el tema del glutamato. Cuando estuve ahí SORPRESA! Me encontraba de fábula. De hecho, creo que es de los viajes en los que mejor me he encontrado. Y eso que allí el glutamato se utiliza normalmente como condimento.
Cuando regresé, se lo comenté a mi hermana, que es dietista y me contó que lo del glutamato monosódico no estaba demostrado, que los problemas gastrointestinales más bien se debían a la baja calidad de los alimentos y conservas empleadas en los restaurante chinos baratos. Por ese motivo, los platos que ofrecen restaurantes de poco categoría de otras gastronomías como los japoneses baratos (normalmente regentados por chinos que poco saben de cocina japonesa de verdad), algunos pakistaníes o thailandeses sospechosamente económicos, también sientan mal a las personas que tenemos sistemas digestivos sensibles.
El glutamato está de hecho presente en una gran cantidad de alimentos de forma natural y a la mayoría de las personas no les produce efectos negativos. Cuando esos se producen tienen que ver con una rara intolerancia que afecta a un ínfimo porcentaje de personas (nada que ver con las intolerancias a la lactosa, gluten, sorbitol, fructosa...), dichos efectos no consisten en diarreas o gases sinó, más bien en dolor de cabeza, sudoración y eczemas.
Mi hermana también me contó que si tan bien me sentaba la comida china de calidad se debía en primer lugar a que, siendo la leche un ingrediente apenas usado en las cocinas del extremo oriente (salvo en las de las montañas y la de los pueblos nómadas), seguro que no había ninguna traza de nata o leche en ningún alimento. Y en segundo lugar a que lo que me servían no eran conservas recalentadas (cuya composición y fecha de caducidad suelen ser dudosas) como en los chinos baratos sinó alimentos frescos cocinados en los restaurantes.
Os añado un par de links que se refieren a la polémica sobre el síntoma del restaurante chino.
http://es.wikipedia.org/wiki/S%C3%ADndr ... ante_chino
http://www.consumer.es/web/es/alimentac ... /35212.php
http://www.nlm.nih.gov/medlineplus/span ... 001126.htm
http://www.spactualmagazine.com/articul ... numero=263