Lunita_21 escribió:
1) Doy un rotundo NO a la eutanasia por la simple y sencilla razón de que no soy quien para decidir sobre la vida de alguien aún cuando la persona no cuente con las facultades para elegir libremente sobre su vida (llamese mi madre, hermano, etc) ya que al hacerlo directamente me remito a estas dos preguntas: ¿COMO RECONOCER EL MOMENTO EN QUE EL SUFRIMIENTO ES YA INUTIL?... ¿COMO DETERMINAR EL MOMENTO EN QUE YA NO VALE LA PENA VIVIR?...así de facil
Lunita, antes que nada me gustaría recordar que estamos en la sección de relax, se supone que aquí deberíamos encontrar el ambiente propicio para encontrarlo y no para estresarnos más de la cuenta. Los temas que estamos abordando llevan siglos debatiéndose y nunca se ha llegado a un acuerdo, así que resulta ingenuo pensar que aquí lo vamos a conseguir. Pero como ya lo empezamos y no deja de ser interesante y apasionante, por lo menos hagámoslo sin demasiado acaloramiento.
Lunita, yo veo que tienes fuertes convicciones sobre todo esto y no espero que las cambies, pero haces unas preguntas y me gustaría dar mi punto de vista. Y me hubiera gustado que también te hubieras explayado algo más en contestarlas tú misma porque puedo inferir que tu posición es en negativo, es decir, en que nadie puede dar respuesta a las mismas, pero no me queda claro sobre el por qué.
Para empezar dices que no eres quien para decidir sobre la vida de alguien. Pero aquí la primera pregunta que a mí me surge es: ¿quién va a decidir entonces?
Yo diría que no nos neguemos la posibilidad de tomar decisiones por difíciles que sean, tal vez sea mucha responsabilidad, pero asumémoslas, no las dejemos en las manos de otros.
Tú tienes toda la capacidad en un momento dado para decidir sobre la vida o la muerte de otro ser humano bajo estas circunstancias siempre que su vida te ataña. Si no lo haces debido a creencias religiosas, por ejemplo que existe un dios y que solamente él puede decidir hasta el último detalle de lo que sucede a los seres humanos, bueno, pues no hay nada más que decir, no tomes ninguna decisión. Aunque te aseguro que hay personas que toman este tipo de decisiones encomendándose a Dios.
Haces estas dos preguntas:
1.- ¿Cómo reconocer el momento en que el sufrimiento es ya inútil?
2.- ¿Cómo determinar el momento en que ya no vale la pena vivir?
A las dos podemos intentar dar respuesta. Cuando la vida ya no es humana ya no vale la pena vivir. Si el cerebro está ya muy dañado, olvídate de una vida humana. Tal vez tengas la vida de un vegetal pero esa vida ya no vale la pena, sobre todo para alguien que tuvo la oportunidad antes de tener una vida humana completa.
Incluso, el sufrimiento vale la pena cuando alguien es capaz de darle un sentido a ese sufrimiento. Pero para darle un sentido se requiere de intencionalidad, y para darle intencionalidad se requiere voluntad, y para tener voluntad se requiere que tengas un cerebro funcionando… y eso ya no lo tiene alguien cuyo cerebro está muerto. Por eso el sufrimiento es inútil ya en este momento, ya no sirve de nada, ya no te enriquece ni te hace mejor persona ni te da sabiduría ni nada, porque ya no puedes sacar provecho del sufrimiento.
El resto de tu organismo está vivo pero el órgano físico que te hace humana ya está muerta. Las células de tu pelo y de tus uñas seguirán viviendo todavía un tiempo incluso cuando tu corazón deje de latir, y esas células también son “tú”, pero lo que te hacía un ser humano hace ya un rato que no existe. ¿En dónde está la dificultad en todo esto?
Nadie ha dicho que tomar una decisión en estas circunstancias es fácil ni que no sea dolorosa, pero tenemos que aprender a tomar decisiones. ¿Por qué las tomamos? Porque somos seres humanos y tenemos libertades y responsabilidades, y tenemos inteligencia (supuestamente) para tomarlas. Y nadie, absolutamente nadie, las va a tomar por nosotros, a menos que desistamos de nuestra libertad y de la responsabilidad para tomarlas.
Y por eso mismo se ha estado repitiendo aquí muchas veces de la importancia de aclarar en vida nuestro deseo sobre lo que queremos que se haga en caso de que nosotros mismos seámos quienes quedemos en ese estado vegetativo. Para quienes no puedan tomar una decisión por nosotros por lo menos tomémosla por ellos desde ahora y hagámosles saber que nuestra voluntad es que se nos deje morir antes que permanecer vegetando por quien sabe cuánto tiempo cuando ya no existen elementos razonables de recuperación. Nunca habrá certeza, pero esperar a tenerla para tomar decisiones es un mal pretexto para no tomarlas.
Y si el deseo de alguien es permanecer como vegetal indefinidamente pues también debería manifestarlo para que los demás lo sepan.
Y sobre el aborto también podría darte mi opinión al igual sobre el resto de lo que dices, pero lo dejamos para otro día
![Wink :wink:](./images/smilies/icon_wink.gif)
.