Nosotros hemos pasado por etapas de todo tipo, como supongo que todas las parejas.
Desde el quedarme embarazada y desear estar todo el día chingando,
a despues de dar a luz no querer ni que me mirara.Por desgracias entonces no nos poniamos de acuerdo, porque en el embarazao como era de alto riesgo, a él le daba miedo por si afectaba al embarazo.
Recuerdo que estaba tan desesperada, porque realmente lo pasaba mal, que un día en la consulta del obstetra, le pregunté que si podía haber problemas, para que él lo escuchara de su boca jaja y el médico le dijo que incluso que era bueno, teniendo cuidado de no hacerlo en el último mes.
Después de un tiempo que pasé no muy bien con problemas de salud, y que fue mas o menos normal, llegó el 2008 y con él de nuevo la adolescencia,
algo surrealista pero real. 
Digo surrealista porque lo era, jaja, pero bueno, recuerdo que estaba mi marido en Zaragoza y cuando venía el fin de semana, sacabamos el trabajo diario de toda la semana.
Tambien creo que mucho tiene que ver que los hijos son mayores, no tienes que estar pendiente de que se van a despertar, no sé otra tranquilidad.
Ver que se van de marcha y mirarnos.....y.....
zasssssssssssssssssssss!!!!!!!!Por suerte esa locura se aplacó, jaja sino, creo que hubieramos fallecido, pero al menos haciendo lo que mas nos gustaba.
