#1
Publicado: Dom Abr 14, 2013 11:21 pm
Buenas,
Hacía ya mucho que no entraba en el foro, casi ni me acuerdo de mi password para acceder!. Bueno, la verdad que tenía que haber seguido un poco más al tanto del foro, mis disculpas. La razón es que llevo ya tanto tiempo sin una leve crisis de SII. Quizás una vez cada 2 meses tengo un poco de movimiento en mi tripa, pero poco más.
Hace unos años mi realidad era muy muy diferente. Por mi carácter nervioso y el stress de mi trabajo mi colon tenía vida propia...y una vida muy movida. Rachas de estreñimiento y diarreas alternadas mermaron la calidad de mi vida a un nivel de no tener ilusión por nada. También el hecho de que estuve casi 4 años paseándome de una consulta de digestivo en otra sin que me diagnosticaran lo que me pasaba había sido un mal añadido. Finalmente dí con un especialista que me diagnosticó como enfermo de SII. Me puso un tratamiento con Duspatalín y otros, aparte de una serie de normas básicas para mejorar mi calidad de vida.
Meses mas tarde me di cuenta de que aquel tratamiento sólo paliaba una pequeña parte de mi enfermedad. En los momentos de stress mis males seguían. Llevar en el bolsillo unas cuantas dosis de Fortasec a todos los sitios era norma obligada. Pese a haber mejorado al saber cual era mi dolencia, saber que era una enfermedad crónica y conocer que no estaba solo en esta lucha, seguía teniendo una calidad de vida algo pobre.
Afortunadamente pude acceder a los consejos de una persona que había vivido esto hacía casi 30 años y que lo había superado de una forma natural. Os resumo esos consejos:
Parte 1. Que nos pasa
=================
- El SII es un trastorno del sistema digestivo, si entendemos como trastorno algo fuera de lo normal o fuera de la media.
- Dicho trastorno es casi siempre crónico.
- Tenemos que aprender a convivir con el.
- El peor síntoma del SII es el miedo. El miedo a relacionarnos con el entorno esperando a que nos de una crisis.
- ¿por que nos ha tocado a nosotros? Mientras no se consiga un tratamiento eficaz esa pregunta es irrelevante, salvo que seamos médicos.
- Los fármacos son importantes, pero es mucho más importante un buen control de la dieta diaria y de los hábitos emocionales.
Parte 2. Que podemos hacer
======================
- Muy importante: Eliminar de la dieta el alcohol, tabaco, café, lácteos, picantes, refrescos gaseosos y, a ser posible, toda la sal que podamos.
- Importante: Evitar comidas precocinadas, "de sobre" y muy aceitosas.
- Recomendable: beber lo menos posible en las comidas, pero si entre horas.
- Aunque tengamos una crisis no debemos dejar de comer (en caso de diarrea). Tomar alimentos astringentes pero nunca dejar de comer y de tomar agua suficiente.
Parte 3. Mi sistema
===============
Todo estos consejos iniciales son cosas básicas que podemos hacer en nuestro día a día. Nuestro SII sigue ahí, pero ahora le estamos dando menos munición. Ahora es cuando contraatacamos.
- La fórmula del puré de manzana. Este sistema es el que ha marcado un antes y un después en mi vida. Me la recomendó una persona que había pasado por lo mismo que yo hará 30 años, cuando este trastorno ni siquiera era considerado como tal. Es muy sencillo. La pectina y otras propiedades de la manzana funcionan como una medicina natural para el intestino. ¿Como lo hacemos? Fácil, yo uso manzanas golden (las amarillas). Se pelan dos manzanas, se trocean y se hacen puré con la batidora. Muy importante, que estén crudas, nada de cocinarlas. Una vez hecho eso lo tomamos como un aperitivo antes de las tres comidas principales. El puré de manzana antes de la comida "prepara" al intestino para la absorción de los alimentos y regula el tránsito intestinal.
Parte 4. No es una cura, pero ayuda
============================
Como os comentaba llevo con este sistema 2 años, y casi el mismo tiempo sin una crisis de las fuertes. Alguna vez he tenido una "mañana mala", pero se ha quedado en un par de viajes al baño y poco más. Nada que ver con mis crisis anteriores a seguir esta dieta.
Esto no resuelve nuestro trastorno, pero lo que hacemos es dejar sin munición al mismo. Ojalá llegue el día que consigan sacar un tratamiento que "borre" del mapa el SII, pero creo que es complicado, ya que yo lo veo muy ligado a nuestro tipo de vida, a nuestro carácter y a otros elementos genéticos y sociales.
ESTA ES SÓLO MI CONCLUSIÓN PERSONAL. Seguramente haya gente que no tolere las manzanas, o sea adicta a la cocacola, o no quiera sacrificar sus fiestas con amig@s y alcohol. Yo asumí que quería vivir sin estar pendiente de tener un baño cerca o del que pensaran las personas de mi alrededor. Este trastorno es "feo", es "sucio" y nos puede ocasionar ser unos estigmatizados (yo a veces me veía así). Por esa razón deje de beber alcohol, de ingerir alimentos que sabía que me sentaban "de culo" pese a cuanto me gustaban, y aprendí a controlar mis emociones...y sin tomar una sola pastilla. Mi propio médico esta alucinado con mi evolución. Sin embargo se perfectamente que mi "amigo" el SII sigue ahí, sin munición, pero esperando a que vuelva a bajar la guardia.
En fin, espero que estos pensamientos que comparto con vostr@s os ayude a poco a poco a convivir con este trastorno.
Suerte a tod@s y mucho ánimo.
Hacía ya mucho que no entraba en el foro, casi ni me acuerdo de mi password para acceder!. Bueno, la verdad que tenía que haber seguido un poco más al tanto del foro, mis disculpas. La razón es que llevo ya tanto tiempo sin una leve crisis de SII. Quizás una vez cada 2 meses tengo un poco de movimiento en mi tripa, pero poco más.
Hace unos años mi realidad era muy muy diferente. Por mi carácter nervioso y el stress de mi trabajo mi colon tenía vida propia...y una vida muy movida. Rachas de estreñimiento y diarreas alternadas mermaron la calidad de mi vida a un nivel de no tener ilusión por nada. También el hecho de que estuve casi 4 años paseándome de una consulta de digestivo en otra sin que me diagnosticaran lo que me pasaba había sido un mal añadido. Finalmente dí con un especialista que me diagnosticó como enfermo de SII. Me puso un tratamiento con Duspatalín y otros, aparte de una serie de normas básicas para mejorar mi calidad de vida.
Meses mas tarde me di cuenta de que aquel tratamiento sólo paliaba una pequeña parte de mi enfermedad. En los momentos de stress mis males seguían. Llevar en el bolsillo unas cuantas dosis de Fortasec a todos los sitios era norma obligada. Pese a haber mejorado al saber cual era mi dolencia, saber que era una enfermedad crónica y conocer que no estaba solo en esta lucha, seguía teniendo una calidad de vida algo pobre.
Afortunadamente pude acceder a los consejos de una persona que había vivido esto hacía casi 30 años y que lo había superado de una forma natural. Os resumo esos consejos:
Parte 1. Que nos pasa
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- El SII es un trastorno del sistema digestivo, si entendemos como trastorno algo fuera de lo normal o fuera de la media.
- Dicho trastorno es casi siempre crónico.
- Tenemos que aprender a convivir con el.
- El peor síntoma del SII es el miedo. El miedo a relacionarnos con el entorno esperando a que nos de una crisis.
- ¿por que nos ha tocado a nosotros? Mientras no se consiga un tratamiento eficaz esa pregunta es irrelevante, salvo que seamos médicos.
- Los fármacos son importantes, pero es mucho más importante un buen control de la dieta diaria y de los hábitos emocionales.
Parte 2. Que podemos hacer
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- Muy importante: Eliminar de la dieta el alcohol, tabaco, café, lácteos, picantes, refrescos gaseosos y, a ser posible, toda la sal que podamos.
- Importante: Evitar comidas precocinadas, "de sobre" y muy aceitosas.
- Recomendable: beber lo menos posible en las comidas, pero si entre horas.
- Aunque tengamos una crisis no debemos dejar de comer (en caso de diarrea). Tomar alimentos astringentes pero nunca dejar de comer y de tomar agua suficiente.
Parte 3. Mi sistema
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Todo estos consejos iniciales son cosas básicas que podemos hacer en nuestro día a día. Nuestro SII sigue ahí, pero ahora le estamos dando menos munición. Ahora es cuando contraatacamos.
- La fórmula del puré de manzana. Este sistema es el que ha marcado un antes y un después en mi vida. Me la recomendó una persona que había pasado por lo mismo que yo hará 30 años, cuando este trastorno ni siquiera era considerado como tal. Es muy sencillo. La pectina y otras propiedades de la manzana funcionan como una medicina natural para el intestino. ¿Como lo hacemos? Fácil, yo uso manzanas golden (las amarillas). Se pelan dos manzanas, se trocean y se hacen puré con la batidora. Muy importante, que estén crudas, nada de cocinarlas. Una vez hecho eso lo tomamos como un aperitivo antes de las tres comidas principales. El puré de manzana antes de la comida "prepara" al intestino para la absorción de los alimentos y regula el tránsito intestinal.
Parte 4. No es una cura, pero ayuda
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Como os comentaba llevo con este sistema 2 años, y casi el mismo tiempo sin una crisis de las fuertes. Alguna vez he tenido una "mañana mala", pero se ha quedado en un par de viajes al baño y poco más. Nada que ver con mis crisis anteriores a seguir esta dieta.
Esto no resuelve nuestro trastorno, pero lo que hacemos es dejar sin munición al mismo. Ojalá llegue el día que consigan sacar un tratamiento que "borre" del mapa el SII, pero creo que es complicado, ya que yo lo veo muy ligado a nuestro tipo de vida, a nuestro carácter y a otros elementos genéticos y sociales.
ESTA ES SÓLO MI CONCLUSIÓN PERSONAL. Seguramente haya gente que no tolere las manzanas, o sea adicta a la cocacola, o no quiera sacrificar sus fiestas con amig@s y alcohol. Yo asumí que quería vivir sin estar pendiente de tener un baño cerca o del que pensaran las personas de mi alrededor. Este trastorno es "feo", es "sucio" y nos puede ocasionar ser unos estigmatizados (yo a veces me veía así). Por esa razón deje de beber alcohol, de ingerir alimentos que sabía que me sentaban "de culo" pese a cuanto me gustaban, y aprendí a controlar mis emociones...y sin tomar una sola pastilla. Mi propio médico esta alucinado con mi evolución. Sin embargo se perfectamente que mi "amigo" el SII sigue ahí, sin munición, pero esperando a que vuelva a bajar la guardia.
En fin, espero que estos pensamientos que comparto con vostr@s os ayude a poco a poco a convivir con este trastorno.
Suerte a tod@s y mucho ánimo.