#211
Publicado: Dom Oct 01, 2006 12:40 am
El colon irritable es un término empleado para describir trastornos digestivos caracterizados fundamentalmente por la presencia de dolor o malestar abdominal asociados a trastornos de la defecación (cambio en la frecuencia o forma de las deposiciones), en los cuales a pesar de efectuar exámenes
de laboratorio o de imágenes(endoscopías, radiografias, ecotomografías, scanners, etc) no se logra pesquisar alteraciones estructurales del aparato digestivo. Aunque el término colon irritable es el más utilizado, se prefiere emplear el término de intestino irritable ya que las alteraciones no necesariamente radican exclusivamente en el colon .
Es también corriente que coexistan otros trastornos como meteorismo (hinchazón),
estitiquez o diarrea persistente a los cuales no se les encuentra causa con los exámenes de laboratorio habituales. Por ello, a veces se emplea el término de trastorno digestivo funcional.
El síndrome del intestino irritable (IBS) es un trastorno común
de los intestinos que produce retortijones, gases, hinchazón
abdominal, y cambios en los hábitos del intestino. Algunas personas
con IBS padecen de estreñimiento (defecación dificultosa o no
frecuente), otras sufren de diarrea (evacuación suelta frecuente, a
menudo con una urgente necesidad de defecar); y algunas personas
experimentan ambos. Algunas veces la persona que tiene IBS experimenta
retortijones que le urgen defecar, pero no puede hacerlo. A lo largo
de los años, IBS ha recibido varios nombres – colitis, colitis
mucosa, colon espástico, intestino espástico, y enfermedad funcional
del intestino. La mayoría de estos términos son inexactos. La
colitis, por ejemplo, significa inflamación del intestino grueso
(colon), IBS, sin embargo, no produce inflamación y no debería
confundirse con una colitis ulcerativa, que es un trastorno más serio.
La causa de IBS es desconocida, y todavía no existe la cura. Los
médicos lo llaman trastorno funcional porque no hay señales de la
enfermedad cuando se examina el colon. IBS causa bastante molestia y
angustia, pero no ocasiona una lesión permanente a los intestinos, y
no conlleva a un sangrado intestinal o a una enfermedad seria, pero
esta enfermedad causa incapacidad a algunas personas. Es posible que
tengan miedo de asistir a eventos sociales, ir a trabajar, o inclusive
viajar a sitios no muy alejados. Sin embargo, la mayoría de personas
con IBS pueden controlar sus síntomas controlando el stress, y
mediante dietas, y a veces medicina recetada por sus médicos.
¿Qué causa el IBS?
El colon, que tiene alrededor de 180 cms de largo, conecta al
intestino delgado con el recto y el ano. La función más importante
del colon es absorber el agua y las sales de los productos digestivos
que provienen del intestino delgado. Dos a tres litros de materia
líquida ingresan del intestino delgado al colon cada día. Esta
materia líquida puede permanecer allí varios días hasta que la
mayoría de fluidos y sales sean absorbidos por el cuerpo. Luego, la
materia fecal pasa a través del colon y mediante una serie de
movimientos se coloca al lado izquierdo, donde se almacena hasta que
se produzca la defecación.
La motilidad del colon (contracción de los músculos intestinales
y movimiento de sus contenidos) es controlada por los nervios y las
hormonas y la actividad eléctrica en el músculo del colon. La
actividad eléctrica sirve como un "marcapasos" similar al
mecanismo que controla la función del corazón. Los movimientos del
colon empujan el contenido lentamente de un lado al otro, pero
principalmente hacia el recto. Todos los días, pocas veces las
contracciones del
músculo mueven el colon hacia abajo y empujan la materia fecal
adelante. Algunas de estas contracciones b originan la defecación.
Debido a que los médicos no han podido encontrar una causa orgánica,
con frecuencia se ha pensado que IBS se produce a consecuencia de un
conflicto emocional o estrés. Mientras que el estrés puede empeorar
los síntomas IBS, los estudios sugieren que otros factores también
son importantes. Los investigadores han descubierto que el músculo
del colon de una persona que padece de IBS comienza a contraerse
solo después de una estimulación moderada. La persona que sufre
de IBS parece tener un colon que es más sensible y reactivo que lo
normal, de tal manera que responde a estímulos que no molestarían a
la mayoría de personas.
Eventos comunes tales como la ingesta de alimentos o la distensión
de gas u otro material en el colon pueden ocasionar una sobrereacción
en una persona que padece de IBS. Ciertas medicinas y comidas pueden
provocar espasmos en algunas personas. Algunas veces el espasmo
retarda el paso de la material fecal, produciendo estreñimiento. Los
productos a base a leche y chocolate o grandes cantidades de alcohol
son agravantes frecuentes. La cafeína causa diarreas en muchas
personas, pero es más probable que afecte a aquellos con IBS. Los
investigadores también han encontrado que las mujeres con IBS pueden
presentar más síntomas durante su menstruación, sugiriendo así que
las hormonas reproductivas pueden aumentar los síntomas del IBS.
¿Cuáles son los síntomas del IBS?
Es importante saber que la función del intestino varía de persona
a persona. La defecación normal varía desde tres evacuaciones de
material fecal al día hasta tres por semana. Una defecación normal
es consistente, pero no dura, no contiene sangre y sale sin
contracciones o dolor. Las personas con IBS, por lo general,
experimentan un retortijón abdominal con un estreñimiento doloroso o
diarrea. En algunas personas, el estreñimiento y la diarrea se
alternan.
Algunas personas con IBS botan moco en su defecación. El sangrado,
fiebre, pérdida de peso y un dolor persistente severo no son
síntomas del IBS, y puede indicar otros problemas
¿Cómo se diagnostica el IBS?
El IBS, por lo general, se diagnostica después que los médicos
descartan enfermedades orgánicas más graves. El médico tomará una
historia médica completa que incluye una descripción cuidadosa de
los síntomas. Se tomará un examen físico y se hará una prueba de
laboratorio. Se examinará una muestra de la materia fecal para
determinar la presencia de sangre. El médico también puede realizar
procedimientos de diagnóstico tales como rayos X o una endoscopia GI
inferior (viendo el colon a través de un tubo flexible) para ver si
hay una enfermedad orgánica.
¿Cómo la dieta y el estrés afectan el IBS?
Muchas personas informan que sus síntomas se presentan después de
las comidas o cuando están estresados. Nadie está seguro por qué
sucede, pero los científicos tienen algunas pistas.
La ingesta de comida hace que el colon se contraiga. Normalmente,
esta respuesta puede provocar una urgente necesidad de defecar dentro
de 30-60 minutos después de una comida. Las personas con IBS pueden
tener esta necesidad antes, la misma que viene acompañada de dolor,
retortijones y diarrea. La fuerza de la necesidad está a menudo
relacionada con el número de calorías presentes en la carne, y
especialmente la grasa en la carne. La grasa en cualquiera de sus
formas (animal o vegetal) es un estímulo b de las contracciones del
colon. Muchos alimentos contienen grasa, especialmente carnes de todos
los tipos, el pellejo de las aves de corral, leche entera, queso crema,
mantequilla, aceite vegetal, margarina, manteca, paltas/avocados, y
chantilly. El estrés estimula los espasmos del colon en las personas
que sufren de IBS. Este proceso no se comprende del todo, pero los
científicos señalan que el colon está controlado en parte por el
sistema nervioso. Una consejería sobre salud mental y reducción del
estrés (capacitación de relajamiento) puede ayudar a aliviar los
síntomas del IBS. Sin embargo, los médicos no dejan de anotar que
esto no significa que el IBS sea el resultado de un trastorno de la
personalidad. IBS es, por lo menos parcialmente, un trastorno de la
movilidad y sensación del colon.
¿Cómo una buena dieta ayuda al IBS?
Para algunas personas el llevar una dieta apropiada aminora los
síntomas del IBS. Antes de cambiar su dieta, es buena idea que anote
en un diario las comidas que aparentemente le causan molestia.
Converse con su médico sobre sus resultados. Tal vez desee consultar
a un dietista registrado que lo puede ayudar a cambiar su dieta. Por
ejemplo, si los productos lácteos
le causan sus síntomas de " inflamación ",
puede tratar de consumirlos menos. Podría tolerar mejor el yogurt
porque contiene organismos que proporcionan lactasa, la encima
necesaria para digerir la lactosa, el azúcar presente en los
productos lácteos.
Como los productos lácteos son una fuente importante de calcio y
otros nutrientes que su cuerpo necesita, asegúrese de obtener los
nutrientes adecuados en las comidas que sustituye.
Las fibras dietéticas pueden disminuir los síntomas de IBS en
muchos casos. Los panes de grano entero y los cereales, vainitas,
frutas, y vegetales son buenas fuentes de fibra. Consulte a su médico
antes de usar un suplemento de fibra para el que no necesita receta.
Las dietas altas en fibra mantienen al colon moderadamente relajado,
lo que puede ayudar a prevenir que se presenten los espasmos. Algunos
tipos de fibra también mantienen el agua en las materias fecales, lo
que evita una materia fecal dura difícil de evacuar. Los médicos por
lo general recomiendan que coma justo las fibras necesarias para que
tenga defecaciones blandas fáciles de evacuar. Las dietas altas en
fibra pueden causar gases e hinchazón abdominal, pero dentro algunas
semanas, esos síntomas a menudo desaparecen mientras su cuerpo se
adecua a la dieta.
Mucha comida puede provocar cólicos y diarrea en las personas que
padecen de IBS. Estos síntomas se pueden aliviar si tiene comidas
más pequeñas con más frecuencia o simplemente come porciones más
pequeñas. Esto debería ayudar, especialmente si sus comidas son
bajas en grasas y altas en carbohidratos tales como pasta, arroz,
panes de grano entero y cereales, frutas y vegetales.
¿Pueden las medicinas aliviar los síntomas de IBS?
No hay una manera estándar de tratar IBS. Si usted padece de
estreñimiento, su médico le puede recomendar suplementos de fibra o
laxantes ocasionales que no necesitan receta médica. O si sufre de
diarrea, le puede recomendar medicina contra la diarrea que no
necesita receta médica. Su médico también le puede recetar otros
programas de tratamiento para ayudarlo a aliviar sus síntomas y
reducir los efectos del IBS en su estilo de vida.
¿Cómo está el IBS relacionado a problemas más serios?
No se ha demostrado que el IBS conlleve a ninguna enfermedad
orgánica seria. No se ha establecido ninguna relación entre el IBS y
las enfermedades inflamatorias del intestino tales como la enfermedad
de Crohn o colitis ulcerativa. IBS no origina cáncer. Algunos
pacientes padecen una forma más severa de IBS, y es posible que dejen
de realizar actividades normales por el temor al dolor y a la diarrea.
En tales casos, los médicos pueden recomendar una consejería sobre
salud mental.
de laboratorio o de imágenes(endoscopías, radiografias, ecotomografías, scanners, etc) no se logra pesquisar alteraciones estructurales del aparato digestivo. Aunque el término colon irritable es el más utilizado, se prefiere emplear el término de intestino irritable ya que las alteraciones no necesariamente radican exclusivamente en el colon .
Es también corriente que coexistan otros trastornos como meteorismo (hinchazón),
estitiquez o diarrea persistente a los cuales no se les encuentra causa con los exámenes de laboratorio habituales. Por ello, a veces se emplea el término de trastorno digestivo funcional.
El síndrome del intestino irritable (IBS) es un trastorno común
de los intestinos que produce retortijones, gases, hinchazón
abdominal, y cambios en los hábitos del intestino. Algunas personas
con IBS padecen de estreñimiento (defecación dificultosa o no
frecuente), otras sufren de diarrea (evacuación suelta frecuente, a
menudo con una urgente necesidad de defecar); y algunas personas
experimentan ambos. Algunas veces la persona que tiene IBS experimenta
retortijones que le urgen defecar, pero no puede hacerlo. A lo largo
de los años, IBS ha recibido varios nombres – colitis, colitis
mucosa, colon espástico, intestino espástico, y enfermedad funcional
del intestino. La mayoría de estos términos son inexactos. La
colitis, por ejemplo, significa inflamación del intestino grueso
(colon), IBS, sin embargo, no produce inflamación y no debería
confundirse con una colitis ulcerativa, que es un trastorno más serio.
La causa de IBS es desconocida, y todavía no existe la cura. Los
médicos lo llaman trastorno funcional porque no hay señales de la
enfermedad cuando se examina el colon. IBS causa bastante molestia y
angustia, pero no ocasiona una lesión permanente a los intestinos, y
no conlleva a un sangrado intestinal o a una enfermedad seria, pero
esta enfermedad causa incapacidad a algunas personas. Es posible que
tengan miedo de asistir a eventos sociales, ir a trabajar, o inclusive
viajar a sitios no muy alejados. Sin embargo, la mayoría de personas
con IBS pueden controlar sus síntomas controlando el stress, y
mediante dietas, y a veces medicina recetada por sus médicos.
¿Qué causa el IBS?
El colon, que tiene alrededor de 180 cms de largo, conecta al
intestino delgado con el recto y el ano. La función más importante
del colon es absorber el agua y las sales de los productos digestivos
que provienen del intestino delgado. Dos a tres litros de materia
líquida ingresan del intestino delgado al colon cada día. Esta
materia líquida puede permanecer allí varios días hasta que la
mayoría de fluidos y sales sean absorbidos por el cuerpo. Luego, la
materia fecal pasa a través del colon y mediante una serie de
movimientos se coloca al lado izquierdo, donde se almacena hasta que
se produzca la defecación.
La motilidad del colon (contracción de los músculos intestinales
y movimiento de sus contenidos) es controlada por los nervios y las
hormonas y la actividad eléctrica en el músculo del colon. La
actividad eléctrica sirve como un "marcapasos" similar al
mecanismo que controla la función del corazón. Los movimientos del
colon empujan el contenido lentamente de un lado al otro, pero
principalmente hacia el recto. Todos los días, pocas veces las
contracciones del
músculo mueven el colon hacia abajo y empujan la materia fecal
adelante. Algunas de estas contracciones b originan la defecación.
Debido a que los médicos no han podido encontrar una causa orgánica,
con frecuencia se ha pensado que IBS se produce a consecuencia de un
conflicto emocional o estrés. Mientras que el estrés puede empeorar
los síntomas IBS, los estudios sugieren que otros factores también
son importantes. Los investigadores han descubierto que el músculo
del colon de una persona que padece de IBS comienza a contraerse
solo después de una estimulación moderada. La persona que sufre
de IBS parece tener un colon que es más sensible y reactivo que lo
normal, de tal manera que responde a estímulos que no molestarían a
la mayoría de personas.
Eventos comunes tales como la ingesta de alimentos o la distensión
de gas u otro material en el colon pueden ocasionar una sobrereacción
en una persona que padece de IBS. Ciertas medicinas y comidas pueden
provocar espasmos en algunas personas. Algunas veces el espasmo
retarda el paso de la material fecal, produciendo estreñimiento. Los
productos a base a leche y chocolate o grandes cantidades de alcohol
son agravantes frecuentes. La cafeína causa diarreas en muchas
personas, pero es más probable que afecte a aquellos con IBS. Los
investigadores también han encontrado que las mujeres con IBS pueden
presentar más síntomas durante su menstruación, sugiriendo así que
las hormonas reproductivas pueden aumentar los síntomas del IBS.
¿Cuáles son los síntomas del IBS?
Es importante saber que la función del intestino varía de persona
a persona. La defecación normal varía desde tres evacuaciones de
material fecal al día hasta tres por semana. Una defecación normal
es consistente, pero no dura, no contiene sangre y sale sin
contracciones o dolor. Las personas con IBS, por lo general,
experimentan un retortijón abdominal con un estreñimiento doloroso o
diarrea. En algunas personas, el estreñimiento y la diarrea se
alternan.
Algunas personas con IBS botan moco en su defecación. El sangrado,
fiebre, pérdida de peso y un dolor persistente severo no son
síntomas del IBS, y puede indicar otros problemas
¿Cómo se diagnostica el IBS?
El IBS, por lo general, se diagnostica después que los médicos
descartan enfermedades orgánicas más graves. El médico tomará una
historia médica completa que incluye una descripción cuidadosa de
los síntomas. Se tomará un examen físico y se hará una prueba de
laboratorio. Se examinará una muestra de la materia fecal para
determinar la presencia de sangre. El médico también puede realizar
procedimientos de diagnóstico tales como rayos X o una endoscopia GI
inferior (viendo el colon a través de un tubo flexible) para ver si
hay una enfermedad orgánica.
¿Cómo la dieta y el estrés afectan el IBS?
Muchas personas informan que sus síntomas se presentan después de
las comidas o cuando están estresados. Nadie está seguro por qué
sucede, pero los científicos tienen algunas pistas.
La ingesta de comida hace que el colon se contraiga. Normalmente,
esta respuesta puede provocar una urgente necesidad de defecar dentro
de 30-60 minutos después de una comida. Las personas con IBS pueden
tener esta necesidad antes, la misma que viene acompañada de dolor,
retortijones y diarrea. La fuerza de la necesidad está a menudo
relacionada con el número de calorías presentes en la carne, y
especialmente la grasa en la carne. La grasa en cualquiera de sus
formas (animal o vegetal) es un estímulo b de las contracciones del
colon. Muchos alimentos contienen grasa, especialmente carnes de todos
los tipos, el pellejo de las aves de corral, leche entera, queso crema,
mantequilla, aceite vegetal, margarina, manteca, paltas/avocados, y
chantilly. El estrés estimula los espasmos del colon en las personas
que sufren de IBS. Este proceso no se comprende del todo, pero los
científicos señalan que el colon está controlado en parte por el
sistema nervioso. Una consejería sobre salud mental y reducción del
estrés (capacitación de relajamiento) puede ayudar a aliviar los
síntomas del IBS. Sin embargo, los médicos no dejan de anotar que
esto no significa que el IBS sea el resultado de un trastorno de la
personalidad. IBS es, por lo menos parcialmente, un trastorno de la
movilidad y sensación del colon.
¿Cómo una buena dieta ayuda al IBS?
Para algunas personas el llevar una dieta apropiada aminora los
síntomas del IBS. Antes de cambiar su dieta, es buena idea que anote
en un diario las comidas que aparentemente le causan molestia.
Converse con su médico sobre sus resultados. Tal vez desee consultar
a un dietista registrado que lo puede ayudar a cambiar su dieta. Por
ejemplo, si los productos lácteos
le causan sus síntomas de " inflamación ",
puede tratar de consumirlos menos. Podría tolerar mejor el yogurt
porque contiene organismos que proporcionan lactasa, la encima
necesaria para digerir la lactosa, el azúcar presente en los
productos lácteos.
Como los productos lácteos son una fuente importante de calcio y
otros nutrientes que su cuerpo necesita, asegúrese de obtener los
nutrientes adecuados en las comidas que sustituye.
Las fibras dietéticas pueden disminuir los síntomas de IBS en
muchos casos. Los panes de grano entero y los cereales, vainitas,
frutas, y vegetales son buenas fuentes de fibra. Consulte a su médico
antes de usar un suplemento de fibra para el que no necesita receta.
Las dietas altas en fibra mantienen al colon moderadamente relajado,
lo que puede ayudar a prevenir que se presenten los espasmos. Algunos
tipos de fibra también mantienen el agua en las materias fecales, lo
que evita una materia fecal dura difícil de evacuar. Los médicos por
lo general recomiendan que coma justo las fibras necesarias para que
tenga defecaciones blandas fáciles de evacuar. Las dietas altas en
fibra pueden causar gases e hinchazón abdominal, pero dentro algunas
semanas, esos síntomas a menudo desaparecen mientras su cuerpo se
adecua a la dieta.
Mucha comida puede provocar cólicos y diarrea en las personas que
padecen de IBS. Estos síntomas se pueden aliviar si tiene comidas
más pequeñas con más frecuencia o simplemente come porciones más
pequeñas. Esto debería ayudar, especialmente si sus comidas son
bajas en grasas y altas en carbohidratos tales como pasta, arroz,
panes de grano entero y cereales, frutas y vegetales.
¿Pueden las medicinas aliviar los síntomas de IBS?
No hay una manera estándar de tratar IBS. Si usted padece de
estreñimiento, su médico le puede recomendar suplementos de fibra o
laxantes ocasionales que no necesitan receta médica. O si sufre de
diarrea, le puede recomendar medicina contra la diarrea que no
necesita receta médica. Su médico también le puede recetar otros
programas de tratamiento para ayudarlo a aliviar sus síntomas y
reducir los efectos del IBS en su estilo de vida.
¿Cómo está el IBS relacionado a problemas más serios?
No se ha demostrado que el IBS conlleve a ninguna enfermedad
orgánica seria. No se ha establecido ninguna relación entre el IBS y
las enfermedades inflamatorias del intestino tales como la enfermedad
de Crohn o colitis ulcerativa. IBS no origina cáncer. Algunos
pacientes padecen una forma más severa de IBS, y es posible que dejen
de realizar actividades normales por el temor al dolor y a la diarrea.
En tales casos, los médicos pueden recomendar una consejería sobre
salud mental.