- 1 - ¿Qué pruebas te han hecho hasta la fecha?
2 - ¿Te han hecho gastroscopia con toma de varias biopsias de duodeno*? Es una prueba imprescindible pero a menudo olvidada.
3 - ¿Tienes, o has tenido en la infancia, más síntomas, aunque no parezcan en principio guardar relación con el problema digestivo? No es preciso tenerlos ni tenerlos todos, ni en esta lista figuran todos los posibles, pero serían indicios para completar la sospecha diagnóstica, pues aunque resulte difícil de entender a priori, estos síntomas podrían tener su origen en trastornos digestivos. Cosas como:
- intolerancia a la leche
catarros y/o otitis de repetición
asma
rinitis
alergias
dermatitis
aftas en la boca
problemas de encías
anemia
ferritina en valores bajos (aunque entren dentro de rango)
cansancio
dolores musculares, óseos o articulares
pérdida de masa ósea (osteopenia u osteoporosis)
dolores de cabeza
problemas de concentración o de memoria
ansiedad
depresión
irritabilidad
cambios de humor
parestesias en piernas, brazos... (sensación de entumecimiento, hormigueo...)
trastornos del sueño (insomnio, hipersomnia...)
trastornos urológicos
trastornos menstruales
impotencia
problemas de fertilidad
uñas frágiles
cabello pobre o quebradizo
cualquier tipo de enfermedad autoinmune (hipo o hipertiroidismo, psoriasis, artritis, diabetes, vitíligo, hepatitis, etc.)
etc.
- intolerancia a la leche
5 - ¿Te han hecho analítica completa? Los datos que no deberían faltar son: hemograma completo, bioquímica completa con PFH (prueba de función hepática), sideremia, ferritina, TSH, T4 libre, T3 libre, anti-TPO (anticuerpos antitiroideos), ANAs (anticuerpos antinucleares), IgA total, antitransglutaminasa tisular de tipo IgA e IgG, antigliadina de tipo IgA e IgG, estudio genético de las variantes alélicas de los genes HLA-DQA1 y HLA-DQB1 (para evaluar la presencia de algún alelo de los HLA-DQ2, HLA-DQ8, HLA-DQ4, HLA-DQ5, HLA-DQ6, HLA-DQ7, HLA-DQ9) y sistemático de orina.
- 1 - ¿Qué pruebas te han hecho hasta la fecha?
Esta información es la que debería ofrecerse a cualquier persona que pregunta en el foro, ya sea que lleve años con diagnóstico de SII o un tiempo con problemas digestivos a los que no encuentran solución. ¿Por qué? Porque la presencia de alteraciones digestivas que no se controlan, máxime si van asociadas a síntomas extradigestivos, obliga a considerar la posibilidad de trastornos causados por el gluten. La enfermedad que más solapa síntomas con el SII es la Enfermedad Celiaca, que se considera la enfermedad crónica intestinal más frecuente, estimándose que 1 de cada 100 personas va a padecerla, pero por desgracia, aproximadamente el 90% de celíacos está aún sin diagnosticar, por culpa de la aplicación de protocolos antiguos.
Recientemente, en Octubre de 2008, el Ministerio de Sanidad lanzó unas nuevas recomendaciones, donde se reforman dichos protocolos diagnósticos desfasados y se especifica que los pacientes con SII deben ser revisados minuciosamente. Parece evidente que esta información no se ha difundido entre la profesión médica todo lo que debiera, pues aún nos encontramos muchos profesionales que no la aplican. Cito textualmente:
http://www.msc.es/organizacion/sns/plan ... rcha2.html
"Los pacientes que padecen diarrea acuosa crónica e intermitente y que han sido catalogados de síndrome de intestino irritable (SII) deben ser revisados de forma minuciosa. La coexistencia de flatulencia o distensión abdominal, borborigmos y deposiciones mezcladas con abundante gas (explosivas) obliga a considerar la posibilidad de una EC. El estreñimiento crónico no es un síntoma excluyente de padecer la EC. (EC=Enfermedad Celíaca)"
"La EC debe incluirse en el diagnóstico diferencial de los pacientes con dispepsia tipo dismotilidad o distrés postprandial (saciedad precoz y plenitud postprandial), especialmente si asocian flatulencia, hinchazón y meteorismo. La sospecha debe ser firmemente considerada cuando los síntomas son crónicos y recurrentes y no han respondido adecuadamente a un tratamiento empírico."
El Síndrome de Intestino Irritable se considera un trastorno funcional, en el que pueden estar encuadrados numerosos celíacos por utilizar los protocolos desfasados:
"A menudo, el enfermo celíaco ha sido visitado por numerosos facultativos y sometido a diversas exploraciones complementarias, y etiquetado de un trastorno funcional. Estos pacientes merecen una especial atención, en particular, si además refieren una historia de aftas bucales, astenia, irritabilidad o depresión."
Dichos protocolos desfasados están errando por el hecho de incluir como imprescindibles para el diagnóstico los anticuerpos de la celiaca (antitransglutaminasa AAtTG) y la atrofia vellositaria, que no tienen por qué estar presentes:
"Los marcadores serológicos (AAtTG) resultan de elección para iniciar el despistaje de los pacientes con mayor probabilidad de presentar EC. Una serología negativa no permite excluir el diagnóstico de EC. De hecho, una proporción de pacientes con enfermedad celíaca, que presentan formas histológicas leves e incluso con atrofia de vellosidades, no expresan anticuerpos antitransglutaminasa en el suero."
Lamentablemente, la tónica habitual es que a los pacientes de SII no se os revise con esa minuciosidad que recomienda el propio Ministerio de Sanidad, pues a muchos se os diagnostica sin haber hecho todas las pruebas pertinentes. Se deben realizar todas ellas, para descartar todo tipo de patologías, antes de colgar la etiqueta de SII, pues es una enfermedad que se diagnostica por exclusión, sólo cuando no se encuentra nada. Pero para encontrar, hay que saber buscar, sea cual sea la causa (el gluten, parásitos, infecciones, etc.). Debéis conseguir la atención médica adecuada, con todas las pruebas necesarias.
La enfermedad celiaca no es una simple enfermedad digestiva, sino una enfermedad autoinmune multisistémica. El no diagnóstico o el retraso en llegar a él, pueden ocasionar consecuencias muy serias e irreversibles para la salud, en cualquier punto del organismo.
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